lunes, 18 de enero de 2010

"¡Joder, no veas cómo me lo he pasado!"

Butcher alcanzará algún día a Maradona
Por John Wyatt
El prestigioso diario The Guardian se puso recientemente a recopilar las mejores fotos de la historia del deporte y, una vez elegidas, preguntó a sus lectores por internet sobre sus preferencias. La número uno, sorprendentemente, no muestra un récord olímpico, ni un gol legendario, ni siquiera un alegato a la superación y a la deportividad. Los lectores de The Guardian eligieron una instantánea, ya mítica en los territorios de la rubia Albión, en la que Terry Butcher, capitán inglés, sale del campo como si regresara de combatir en El Alamein.

Esa foto, junto a los goles de Maradona, le acompañó de por vida. Por un lado, esa instantánea le dio una inmerecida fama de pelotero violento, malencarado y rompepiernas. Su apellido, Butcher (Carnicero, en inglés), tampoco le ayudó. Con más técnica que sus contemporáneos Tony Adams (Arsenal) y Des Walker (N. Forest) no le costó demasiado hacerse fuerte en la línea de cuatro de la Inglaterra de los 80 y primeros años de los 90. Y eso que había nacido el día de los inocentes de 1958 en Singapur, ciudad bajo cero en el termómetro futbolero, y provenía de un modesto, el Ipswich Town, en el que ganó la UEFA a las ordenes de Sir Bobby Robson.

Después de fichar por el Glasgow Rangers en plena 'England Invasion', como se le conoce a la oleada de jugadores ingleses que recalaron en Escocia, ganó dos ligas y se rompió la pierna. Al recuperarse, volvió a jugar con la selección en la Copa del Mundo de México (1986).Ahí llegó uno de los momentos más significativos de su carrera, el enfrentamiento con Argentina, la Argentina herida por la derrota en Las Malvinas, la Argentina de Maradona.

En aquel partido, 'El Pelusa' regateó a todos sus rivales para meter al mejor gol de la historia. A los jugadores ingleses los dribló a todos una vez, pero Butcher fue el único al que superó dos veces en la misma jugada. "Aún me veo en mis pesadillas corriendo detrás de ese pequeño bastardo. Cada vez que veo las imágenes, y las he visto miles de veces, tengo la sensación de que estoy más cerca de robarle el balón. ¡Creo que alguna vez lo alcanzaré!".

Hace muy poco, el señor Terrence Ian Butcher, ya como segundo entrenador de Escocia, recordó aquel partido, y dijo que jamas le daría la mano a Maradona: "Es un trauma para mí lo de aquella mano tramposa. Odio a ese tipo con pasión". Maradona respondió a a su manera: "No se preocupen, no voy a dejar de dormir porque Butcher no me de la mano".

Butcher sigue dolido desde el momento en el que, después del encuentro y camino ya del control antidopaje, se cruzó con 'El Pelusa': "¿Cabeza o mano?", preguntó Butcher. "Cabeza", respondió el 10.

¿Y la foto? Ah, la foto. Fue en 1989, en la clasificación para el Mundial de Italia 90. Se jugaba el pase Inglaterra en campo suizo y sólo le valía la victoria. En uno de los primeros lances, un contrario (Ekstrom) le pegó un codazo y le abrió una gran brecha en la frente.

Cualquier otro jugador hubiera dejado el campo, pero él decidió seguir pese al mareo que le produjo el golpe. El fisio le vendó lo mejor que supo. Ya en la segunda parte, cuando los suecos se pusieron a colgar balones al área, a Butcher se le abrió la brecha y comenzó a sangrar a borbotones. Perdió más sangre que toda la que Iniesta tiene en su cuerpo. Fue la única vez que un jugador inglés jugó de rojiblanco. A pesar de todo, no claudicó.

Con la lluvia y el barro, aquel balón impactó una y otra vez en la cabeza de Butcher como un ariete, pero El Carnicero aguantó, Inglaterra ganó y su imagen ("Sangre, sudor y lágrimas" tituló el Times al día siguiente) dio la vuelta al mundo.Acabó sin saber donde estaba, completamente groggy y con la camiseta roja de sangre. Un periodista le preguntó que tal estaba: "Joder, no veas lo bien que me lo he pasado".

4 comentarios:

  1. Que buenisimo articulo. "Perdio más sangre que toda la que tiene Iniesta en su cuerpo"... bien dicho

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  2. Gran artículo. Apunto un dato más, ese sueco diría que fue Johny Ekstrom, conocido en nuestro liga por su paso por el Real Betis Balompié.

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  3. Si que es un buen artículo, se podría hacer una buena película con este caso.

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  4. Gran artículo. Y comprendo que Terry siga dolido, pese a la creencia general, el partido acabó 2-1, así que, por mucha jugada genial que hiciera el Pelusa, sin "la mano de Dios", habrían acabado empate a uno.

    Y sigo pensando que, con ese calor, y esa altitud, Maradona ya jugaba "colocado". Es cierto que cualquiera de nosotros, por muy "rayados que estemos", jamás nos regateariamos a 8 ingleses, pero me parece sospechoso, tras haber vuelto a ver el partido hace un par de años, que uno de los 22 anduviera tan "sobrado" de energías...

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